... Y el Diablo los junta". Jamas se habia visto una situacion con tanta muestra de corruption y de perdida de todos los valores morales como en estas elecciones. Los "enemigos de la Paz" pelan el cobre y sacan a relucir sus mas perfidos sentimientos e ideologia.
"Enemigos irreconcilables" hasta ayer se estrechan las manos y se abrazan como si fueran hermanos, saltandose las supuestas barreras ideologicas que los separaban y demuestran que esas tales barreras eran cuentos para cazar incautos. La policia -esa que querian hacer aparecer como "amiga" de los ciudadanos- olvida que tambien los comunistas son ciudadanos que pagan impuestos y les trabajan a empresarios que los explotan como al resto de trabajadores colombianos.
La debacle moral que presenciamos por cuenta de la oligarquia alcanza tambien a altas dignidades del gobierno, la justicia, y ni se diga del congreso y los militares. Un presidente que maneja un discurso "pacifista" para vender una falsa idea en el exterior a fin de que las organizaciones de derechos humanos no entrometan sus narices en las violaciones de derechos humanos, en tanto en el interior muestra la mas aberrante sevicia contra los pobres que osan manifestarse pidiendo un mendrugo de pan y ordena a sus esbirros atacar a bala y bombas a todo lo que parezca guerrillero, es muestra de la clase de pais que manejan.
Tan pobre es este estado y su gobierno que elevaron a la categoria de Dios a un inquisidor fascista que se solaza quemando libros "herejes" y persigue con sana a los de izquierda en una nueva persecucion a los comunistas como si todavia viveramos los tiempos de la guerra fria. Como el invento se les devolvió cual celerido bumerán hoy están esperanzados en que sea la defensa del alcalde que ellos ordenaron crucificar la que los salve de ese impío troglodita.
Al igual que el proverbio, ellos hoy están juntos y todos a una atacan a los comunistas, a la izquierda, porque para ellos todos son iguales, todos quieren arrebarle el poder a su clase, la escogida por Dios para manejar el poder. Por ello vemos ese espectáculo que da asco e inmensas ganas de vomitar. Tal carencia de valores morales y principios éticos nunca se había visto y tampoco habíamos presenciado espectáculo circense más inaudito que el de ahora.
El pueblo se está dando sus mañas para enfrentar tan aberrante situación. Ha organizado nuevas organizaciones como la Marcha Patriótica y recuperado de sus cenizas otras como la Unión Patriótica, las cuales no por casualidad tienen el carácter patriótico ante una oligarquía cipaya que entrega arrodillada la soberanía nacional. Además, ese carácter patriótico es la garantía para la más amplia unidad de clase.
Los colombianos de clase, los de pueblo, sabemos que así el diablo los una, su propio egoísmo los separara y ahí estaremos prestos para señalarlos con el dedo de la ignominia. Bandidos, corruptos, corrompidos, ladrones, narcotraficantes, trogloditas, asesinos...
